Paginación

HIDE

Post Meta

HIDE

GRID STYLE

GRID_STYLE

POST SNIPPETS

FALSE

HOVER EFECTS

TRUE

HIDE_BLOG

HIDE_BLOG

¡LUMIÈRE! COMIENZA LA AVENTURA

En el año 1824 Peter Mark Roget describió por primera vez el fenómeno de la persistencia retiniana al observar que cuando miraba una rueda d...

En el año 1824 Peter Mark Roget describió por primera vez el fenómeno de la persistencia retiniana al observar que cuando miraba una rueda de radios en movimiento de rotación por la rendija de una pantalla, contando con una velocidad determinada y un cierto grado de iluminación, los radios se veían estacionarios. Esta observación fue denominada PERSISTENCIA DE LAS IMPRESIONES RETINIANAS y formulada por el físico belga Joseph Plateau en 1829, fijando la duración de esta persistencia en una décima de segundo. De esta manera para que el cerebro humano tenga la impresión de un movimiento continuo, las imágenes registradas por el ojo deben sucederse, al menos, diez veces por segundo. Una sensación óptica capaz de poder observar imágenes proyectadas en vidrio sobre lienzo o en una pared gracias a LA LINTERNA MÁGICA, el primer aparato óptico inventado por Atanasius Kircher en 1854. Anteriormente ya existía desde 1826 el TAUMATROPO o también llamado Maravilla giratoria inventado por John Aytorn consistente en una placa circular, como una moneda, en cada una de cuyas caras había dibujada una imagen (como ejemplo un loro y una jaula), atados en los extremos tenía unas gomas o cordeles que permitían hacerlo girar a una velocidad suficiente como para que se produjera la superposición de imágenes en la retina; el FENAKISTOSCOPIO de 1833 patentado por Joseph Plateau consistente en un disco con hendiduras donde se colocaban las imágenes sucesivas de un movimiento. Se hacía girar el disco ante un espejo y la imagen reflejada se veía en movimiento a través de las hendiduras; o el ZOOTROPO o tambor mágico de 1934 inventado por William G. Horner consistente en un cilindro con hendiduras a través de las cuales se veía la cara interna donde se sucedían imágenes.
Artilugios para el entretenimiento y la constancia científica  en búsqueda de la imagen en movimiento que llevaron a Thomas Alba Edison a grabar el 7 de enero de 1894 una brevísima película titulada RECORD OF A SNEEZ para su invento el QUINETOSCOPIO, precursor del moderno proyector cinematográfico, que se convirtió en popular gracias a su forma de caja de madera con una serie de bobinas sobre las que corrían 14 metros de película en un bucle continuo y que se ponía en marcha al introducir una moneda. Un aparato destinado a la visión individual de bandas de imágenes sin fin que no permitía su proyección sobre una pantalla. Micropelículas que alcanzaron popularidad gracias a sus salas en atracciones donde se podían ver coloreadas el negativo para hacerlas más vistosas como las recordadas imágenes dedicadas a la bailarina Annabelle.
Edison siguió investigando y creó el QUINETÓFONO su primer intento por unificar la imagen y el sonido presentado en la primavera de 1985 con su primera película titulada DICKSON EXPERIMENTAL SOUND FILM. Un invento que cayó en el olvido hasta que, en el año 1913, Edison presentara un nuevo quinetófono diseñado para sincronizar el sonido con una película proyectada en una pantalla externa, pero todavía persistían los problemas con cortes de película, y con los operadores que estaban mal preparados, lo que provocaba desincronización con el sonido. El resultado, entonces, fue la insatisfacción de la audiencia y la falta de popularidad del quinetófono.
Para entonces ya existía la gran revolución del invento del CINEMATÓGRAFO patentado en febrero de 1894 por los hermanos Lumière quienes presentaron su primera proyección la noche del 28 de diciembre de 1985 en una demostración de pago en los bajos del Grand Café de París, organizada por Clément Maurice. La entrada valía un franco y asistieron 33 personas. Los hermanos Lumière llamaron «cinématographe» al instrumento que servía al mismo tiempo para la toma de imágenes en movimiento y su proyección en una pantalla. Una serie de películas donde destacaba el primer cortometraje LA SALIDA DE LOS OBREROS DE LOS TALLERES LUMIÈRE y recogía una instantánea de la realidad, LA LLEGADA DE UN TREN A LA ESTACIÓN o la mirada cómica de EL REGADOR REGADO. Unas proyecciones que suscitaron un gran entusiasmo en los espectadores quienes se sintieron fascinados ante las imágenes en movimiento proyectadas en la pantalla llegando a ser definido el momento como " uno de los más extraordinarios de la historia de la humanidad". El éxito fue inmediato y clamoroso. Las películas de los Lumière dieron la vuelta al mundo desde 1896, llevando a todos los lugares el conocimiento de su extraordinario invento. Así nació la industria cinematográfica y con ella una nueva forma de expresión artística.
Este instante es el que recoge el documental ¡LUMIÈRE! COMIENZA LA AVENTURA dirigido por Thierry Frémaux (delegado general del Festival de Cannes y director del Instituto Lumière de Lyon) donde se ofrece películas restauradas que nos muestran un viaje a los orígenes del cine. Una mirada única sobre Francia, el séptimo arte y el mundo que inaugura el siglo XX. Un bello homenaje del cinematógrafo y sus inventores con una selección de 108 de los 1.422 cortos de 50 segundos de duración que realizaron los hermanos Louis y Auguste Lumière y sus operadores.
Como comenta Thierry Frémaux "contra lo establecido, creo que los Lumière siguen siendo unos grandes desconocidos. Todo el mundo te puede citar dos o tres títulos suyos, pero es que rodaron casi 2.000. Cuando se habla de ellos se hace con más respeto que convicción. Se suele decir que son parte de la prehistoria del cine, lo cual es falso: ellos son el cine".
Un viaje al cine primitivo como conocimiento del mundo. Los 108 cortos son comentados por Frémaux quien analiza los logros y estilo de los Lumière a la vez que explica las técnicas de rodaje con unas cámaras que carecían de visor y que convertían el resultado visual en pura intuición en un arte instantáneo. Una posibilidad de poder descubrir como los Lumière fueron creadores del gag, la profundidad de campo, el travelling, la puesta en escena, la dirección de actores y hasta el remake como explica Frémaux: "Sí pero no me parece que sea una reivindicación sino la constatación de una serie de evidencias. Históricamente se han atribuido esas innovaciones a directores como Griffith o Eisenstein, cuando lo cierto es que todo eso ya estaba en el cine de los Lumière, tanto en las películas que ellos dirigieron como en las que produjeron. Desde la libertad de espíritu más absoluta ellos comenzaron a experimentar con las posibilidades del lenguaje cinematográfico y el resultado está a la vista. No se limitaron a aplicar una técnica sino que lo hicieron para lograr un efecto estético que apoyase una narración".
¡LUMIÈRE! COMIENZA LA AVENTURA resulta un gran trabajo en los orígenes del cine recuperando calidad visual en una lograda restauración digital donde se puede comprobar el trabajo de los Lumière apreciando la profundidad de campo, las perspectivas en diagonal y los movimientos de cámara para retratar tanto una estampa familiar en vacaciones como la entrada de un tren en una estación. Un amor por el cine elaborado por el director Frémaux quien transmite este documental, según sus palabras, "a las nuevas generaciones. Eso es algo que estaba también en los Lumière. Cuando ellos mandaron a sus operadores a recorrer el mundo en busca de imágenes lo que hicieron fue dotar al cine de una misión muy clara: contar al que es diferente o, como dice Bertrand Tavernier: los Lumière ofrecieron el mundo al mundo".
¡LUMIÈRE! COMIENZA LA AVENTURA homenaje, restauración y viaje visual con los hermanos Lumière en su invención del futuro. Luces, cámara, acción.

★★★★☆

FICHA TÉCNICA
¡LUMIÈRE! COMIENZA LA AVENTURA - Título original: Lumière! L’aventure commence - Director: Thierry Frémaux - Año: 2017 - Duración: 90 min. - País: Francia -108 cortos digitalizados de los hermanos Lumière donde intervienen Thierry Frémaux,  Auguste Lumière,  Louis Lumière,  Martin Scorsese - Guion: Thierry Frémaux - Estreno en España: 20 de octubre 2017.


Escrito por: © María José S. Bermejo